Destinos Truncados - Стругацкие Аркадий и Борис (читаемые книги читать txt) 📗
Vaya a saber que reaccion esperaba ante su predica benevolente. Que comenzaran a mirarse unos a otros, perplejos, o que sus rostros reflejaran que habian comprendido, o que un suspiro de alivio recorriera el salon como senal de que aquella incomprension habia desaparecido finalmente y ahora era posible comenzar todo desde el inicio, sobre un fundamento nuevo, mas realista... En todo caso, no ocurrio nada de ello. En las filas traseras volvio a levantarse el chico de los ojos biblicos.
—?No nos podria decir que es el progreso? —pregunto.
Viktor se sintio ofendido. «Claro que si —penso—. Y despues preguntaran si una maquina puede pensar, y si hay vida en Marte. Las aguas vuelven a su cauce.»
—El progreso —explico— es el movimiento de la sociedad hacia un estado tal en el que las personas no se asesinan, no se pisotean ni se torturan unas a otras.
—?Y a que se dedican? —pregunto un chico gordo, a la derecha.
—A beber y comer kvantum satis-balbuceo alguien a la izquierda.
—?Y por que no? —dijo Viktor—. La historia de la humanidad conoce muy pocos intervalos de tiempo en los que la gente podia beber y comer kvantum satis.Para mi, el progreso es el avance hacia un estado en el que no pisotean y no asesinan. Y en mi opinion, no es tan esencial a que van a dedicarse. Si lo quieren asi, para mi son importantes las condiciones indispensables del progreso, y las suficientes es algo que la vida lo dira...
—Perdoneme —intervino Bol-Kunats—. Analicemos el siguiente esquema: la automatizacion sigue desarrollandose al mismo ritmo que ahora. Entonces, dentro de varias decadas, la mayoria absoluta de la poblacion activa de la Tierra queda expulsada de los procesos productivos y de la esfera de servicios, pues pasaran a ser innecesarios. Todo sera magnifico: la gente estara satisfecha, no habra por que matarse unos a otros, nadie molestara a nadie... y nadie necesitara a nadie. Por supuesto, habra varios cientos de miles de seres humanos que aseguren el trabajo ininterrumpido de las viejas maquinas y la creacion de maquinas nuevas, pero los miles de millones restantes simplemente no seran necesarios. ?Eso esta bien?
—No se —dijo Viktor—. En general, no creo que este bien del todo... Da pena... Pero debo decirles que, de todos modos, eso es mejor que lo que ahora vemos. Asi que es obvio que habra cierto progreso.
—?Y usted querria vivir en semejante mundo?
—No logro imaginarme bien ese mundo —contesto Viktor tras pensarlo un instante—, pero si hablo con sinceridad, no estaria mal probar.
—?Y puede imaginarse a personas que no sientan el menor deseo de vivir en un mundo semejante?
—?Claro que si! Hay gente, los conozco, que se moririan de aburrimiento alli. Un lugar que no necesita gobierno, que no hay nadie a quien darle ordenes, que no hay por que pisotear a nadie. Es verdad que dificilmente renunciarian a hacerlo, tendrian ante si la rarisima oportunidad de transformar el paraiso en una pocilga... o en un cuartel. Con gusto destruirian un mundo semejante. Bien, quiza no puedo imaginarme a esa gente.
—?Y sus personajes, esos que tanto ama, a ellos les gustaria un futuro semejante?
—Por supuesto. Alli alcanzarian finalmente la paz que merecen.
Bol-Kunats se sento, pero enseguida se levanto el chico de la cara llena de granos, moviendo la cabeza con un gesto de amargura.
—Esa es la esencia de la cuestion. No se trata de si entendemos o no la vida real, la esencia del problema consiste en que ese futuro sea totalmente aceptable para usted o para sus personajes, y para nosotros seria un cementerio. El fin de la esperanza. El final de la humanidad. Un callejon sin salida. Por eso decimos que no queremos gastar fuerzas para trabajar por el bienestar de esos tipos suyos, sucios hasta las orejas y sedientos de paz. Ya no es posible insuflarles energia para una vida verdadera. Y dira lo que diga, senor Banev, pero nos ha mostrado en sus libros, libros interesantes, que yo aplaudo sinceramente, que en la humanidad no existen ya los objetos para aplicar las fuerzas, al menos en su generacion... Como dice su cancion: «Verdad y mentira no son tan diferentes, la verdad de ayer se vuelve mentira, la mentira de ayer se volvera manana la verdad mas sincera, la verdad mas comun...». Asi vagan ustedes, de mentira en mentira. Simplemente, no pueden creer que son ya cadaveres, que crearon con sus manos un mundo que se ha convertido en su lapida. Se pudrieron en las trincheras, estallaron bajo los tanques, ?y quien mejoro a causa de ello? Denostaron al gobierno, al sistema, como si no supieran que su generacion simplemente no merece un gobierno mejor, un sistema mejor. Les daban bofetadas, usted perdone, por favor, y seguian repitiendo que el hombre es, por naturaleza, bueno... o peor todavia, que decir «hombre» es enorgullecerse. ?Y han llamado hombre a cualquier cosa!
El orador de los granos en la cara hizo un ademan y se sento. Se hizo el silencio. Al momento, se levanto de nuevo.
—Cuando decia «ustedes» no me referia personalmente a usted, senor Banev.
—Se lo agradezco —dijo Viktor, molesto.
Sentia una profunda irritacion: aquel mocoso lleno de granos no tenia derecho a hablar tan categoricamente, eso era un descaro, un atrevimiento... merecia una colleja y que lo sacaran del salon por una oreja. Se sentia incomodo. Mucho de lo que habian dicho era verdad, el mismo pensaba asi, y ahora habia caido en la situacion de la persona obligada a defender lo que odiaba. Se sentia confuso, no tenia idea de como comportarse, como seguir la conversacion y si valia la pena hacerlo... Miro el salon y vio que esperaban su respuesta, que Irma esperaba su respuesta, que todos aquellos monstruos rozagantes, de orejas grandes, pensaban de la misma manera, y que el atrevido de los granos se habia limitado a comunicar la opinion general y la habia expresado sinceramente, con profunda conviccion, y no porque el dia anterior hubiera leido un folleto prohibido, que en realidad no sentian el menor agradecimiento, ni aunque fuera el respeto mas elemental hacia el, Banev, por haber ido de voluntario con los husares, por haber combatido a caballo contra los tanques, por haber estado a punto de morir de disenteria en el cerco, por haber matado a los centinelas enemigos con un cortaplumas y despues, en la paz, por haberle dado una bofetada a un oficial operativo que le habia propuesto escribir una denuncia, por haber estado sin trabajo, con un agujero en los pulmones, especulando con frutas frescas, aunque le prometian elevados cargos... Y, en realidad, ?cual es la razon para que me respeten por todo eso? ?Por haberme lanzado contra los tanques con un sable? Hay que ser un idiota para tener un gobierno que lleva a su ejercito a semejante situacion... En ese momento se estremecio, imaginando el enorme razonamiento que deberian haber hecho aquellos pichones para llegar a unas conclusiones a las que los adultos llegan solamente arrancandose toda la piel, destrozando su alma, revolviendo su vida y muchas vidas vecinas... y ni siquiera todos, solamente algunos, pues la mayoria sigue considerando que todo fue correcto y magnifico, y que si es necesario, estarian dispuestos a comenzar todo otra vez por el principio. ?Habrian llegado de verdad los tiempos nuevos? Miro la sala casi con terror. Al parecer, el futuro habia logrado introducir sus tentaculos en el mismo corazon del presente, y ese futuro era frio, implacable, le daban igual todos los meritos del pasado, autenticos o imaginarios.